Christmas Readings: Isaiah 62:1-5; Psalm 89:4-5, 16-17, 27, 29; Acts 13:16-17, 22-25; Matthew 1:1-25
From the Pastor’s Desk …. A Child, A Mother and the Shepherds.
Today a great light shines – the light of charity. Despite the fact that 2000 years have passed by, this still is the “Holy Night”. The only good news that can remove the fears of man today and can fill the soul with joy are those brought by the angels to the shepherds: “The Savior has been born!” Christmas night, good night, holy night! We feel great emotion as we face this mystery. Today everything is big and at the same time, small.
The child is small. What does a baby mean? It is the small symbol of a child that grows, that will take his place, that will become a unique and unrepeatable person in history. It represents the future. The mystery of our redemption begins this way, as a child. Our faith also is still small: We believe little, we hope little. In this night of radiant light, love illuminates us from the manger. From this love, fraternity is born, forgiveness is born, mercy is born, peace is born. We feel transfigured!
Today you take the shepherds’ place. They were the first to receive – filled with joy – the announcement of salvation. The shepherds come to the grotto and find, as the angel had said, a newborn laid in a manger. I too want to say to you: “Don’t be afraid, I bring you great news: A Savior has been born”.
These are troubling times. Our moral misery makes us afraid when we don’t have the hope of a merciful hand that forgives us and consoles us; we are afraid when we don’t have the courage to take the hand of Christ. We are afraid of our frailness and are not strong enough to take our Lord’s hand as our master. He is the only one that can guide us.
Let’s live Christmas by Mary’s side to discover – like her – what is most important of the Christmas mystery. Christmas like Mary, means to look for moments of solace to contemplate “the great things that God almighty has done in me”. It is to learn to appreciate silence and reflection to live in a more Christian way our life commitments. “Mary held all these things in her heart”. To live Christmas with Mary means to have the strength enough to not allow social events, conformism, fashion… Sometimes, it is necessary to fight hard to be faithful to one’s own ideas and convictions.
Christmas means that Christ must be born in you. He needs to be in the world looking like you – your face, your hands, your will. He needs to transform the world in something truly beautiful, more human, more just. We cannot limit ourselves to “celebrate” Christmas. We must build it helping Christ be born in today’s world. Why not read the narration of Christmas in the Gospel? Why not go into church for a while to contemplate the scene of the Nativity? Why not alternate the parties, vacation, the exchange of presents with some moments of solace and reflection? May your doings say more than your cards.
Merry Christmas! God bless you, Fr. Oscar
Del escritorio del Sr. Cura… Un Niño, Su Mamá y los pastores
Hoy brilla una gran luz, es la estrella de la bondad. A pesar de que han pasado 2000 años, esta sigue siendo la “noche buena”. La única noticia capaz de eliminar los temores del hombre de hoy y de llenar el alma de alegría es la que trajeron los ángeles a los pastores: “¡Ha nacido el Salvador!” Sentimos la emoción frente al misterio. Esta noche todo es grande y al mismo tiempo, todo es pequeño.
Es pequeño el niño que nace. ¿Qué significa un niño? Representa el futuro. El misterio amable de nuestra redención comienza así, como un niño. También nuestra fe es todavía pequeña: Creemos poco, esperamos poco. En esta noche radiante de luz, el amor nos ilumina desde el pesebre. De este amor nace la fraternidad, nace el perdón, nace la misericordia, nace la paz. ¡Nos sentimos transfigurados!
Esta noche ustedes ocupan el puesto de los pastores. Ellos fueron los primeros que recibieron llenos de gozo el anuncio de la salvación; los primeros que vienen a la gruta y encuentran, como el ángel dijo, un recién nacido recostado en un pesebre; También yo quiero decirles a ustedes: “No tengan miedo, les traigo una feliz noticia: Ha nacido el salvador”.
Hay noticias que pueden asustarnos. Nos da miedo nuestra miseria moral cuando no tenemos la esperanza de una mano misericordiosa que nos pueda perdonar y alentar; nos da miedo nuestra pobreza cuando no tenemos el valor de tomar la mano de Cristo pobre; nos asusta nuestra debilidad cuando no tenemos la fuerza de tomar la mano del Señor como maestro porque sólo Él nos puede guiar.
Vivamos esta navidad al lado de María para descubrir como ella lo más grande del misterio de Navidad. Navidad con María quiere decir buscar momentos de soledad para contemplar las “cosas grandes que ha hecho en mí Dios todopoderoso”. Es aprender a valorar el silencio y la reflexión para vivir más cristianamente nuestro compromiso. “María conservaba estas cosas en su corazón“.
Vivir la Navidad con María significa tener la fuerza para no dejarse arrastrar por los acontecimientos sociales, los conformismos, las modas. A veces hay que luchar mucho para ser fieles a las propias ideas y principios.
Navidad quiere decir que Cristo debe nacer dentro de ti. Necesita presentarse al mundo con tu cara, tus manos, tu voluntad. Necesita transformar al mundo en algo verdaderamente hermoso, más humano, más justo. No podemos limitarnos a “celebrar” la Navidad. Tenemos que construirla haciendo nacer a Cristo en el mundo de hoy. ¿Por qué no leer en el Evangelio la narración del nacimiento? ¿Por qué no entrar un rato en el templo a contemplar las escenas del Belén? ¿Por qué no alternar las fiestas, las vacaciones, la evasión, el intercambio de regalos, con momentos para aislarse y reflexionar? Que tus obras digan más que tus tarjetas ¡
Feliz Navidad! Dios les bendiga, P. Oscar