Sunday’s Readings: Acts 10:34, 37-43; Psalms 118:1-2, 16-17, 22-23; Colossians 3:1-4; John 20:1-9
REJOICE AND BE GLAD
During the first three or four centuries of Christianity, if you asked a Christian to name the feast days of the church, your answer would have been a puzzled stare, for there was only one feast: the Resurrection of the Lord. Every Sunday was a feast celebrating the one great feast. Even though our calendar now has many beautiful and holy feasts, we must continually be called back to the fact that all these other feasts exist because of the feast of Christ’s passover from death to life. The psalm today proclaims this message well: “This is the day.” It is not one of many days, but it is the day of all days, the one that gives all the others their origin, purpose, meaning, and destiny. Listen carefully to Peter’s speech in Acts with its recollection of the Passion, to the words of the apostle Paul, and to the account of Mary Magdalene, John, and Peter finding the empty tomb, and you will hear the many wonderful works that God has done for us through Christ. Rejoice and be glad!
Copyright © J. S. Paluch Co.
ALÉGRENSE Y REGOCÍJENSE Durante los primeros tres o cuatro siglos del cristianismo, si se le preguntaba a un cristiano el nombre de las fiestas de la Iglesia, su respuesta habría sido una mirada de sorpresa porque había una sola fiesta: la Resurrección del Señor. Cada domingo era una celebración de la gran fiesta. A pesar de que nuestro calendario tiene ahora muchas fiestas hermosas y santas, continuamente debemos ser llamados de nuevo al hecho de que todas estas fiestas existen a causa de la fiesta del paso (Pascua) de Cristo de la muerte a la vida. El Salmo de hoy proclama este mensaje así: “Este es el día”. No es uno de muchos días, pero es el día de todos los días, el que da a todos los demás su origen, propósito, significado y destino. Escuchen con atención el discurso de Pedro en Hechos recordando la Pasión, las palabras del apóstol Pablo y al recuento que hacen María Magdalena, Juan y Pedro al encontrar la tumba vacía, y oirán las obras maravillosas que Dios ha hecho para nosotros en Cristo. ¡Alégrense y regocíjense!
Copyright © J. S. Paluch Co.