Comunidad de Santa Maria Inmaculada y Mision de San Pedro, Antes de ascender a los cielos, Jesús encomendó a sus discípulos la misión de ir al mundo entero y anunciar el Evangelio a toda creatura. La evangelización descansa en último término en Dios, que la sostiene por la fuerza del Espíritu Santo; pero Jesús la ha puesto en manos de todos sus discípulos, de la comunidad de la Igle-sia, que formamos todos los cristianos. La misión corresponde, pues, a la colaboración activa y responsable de todos. Esta colaboración va desde la vivencia personal y coherente de la propia fe, pasa por la implicación personal en la vida y en las tareas de la Iglesia. Asi pues queremos dar las gracias a todas las persona que hicieron este evento de Nuestra madre Virgen de Guadalupe tan importante para nuestra fe fuera posible. A cada persona bendiciones. Dios se los regrese 101% por el trabajo y dedicacion, por este evento tan especial para todos. Muchas gracias. Dios los bendiga.